La intuición no es solo algo que simplemente aparece por casualidad, sino que uno debe desarrollar.
Para desarrollar la intuición, hay cuatro pasos esenciales que uno puede practicar, y para ello nos basaremos en algunos de los conceptos tratados en el libro Second Sight, escrito por Judith Orloff, MD: se trata de un libro donde esta psiquiatra intuitiva narra su historia y te muestra cómo aprovechar tu propia sabiduría interior.
Pasos para desarrollar la intuición
Para poder oír nuestra propia intuición, es necesario volver a conectarnos con nuestro organismo, con nuestro cuerpo y prestar atención a sus manifestaciones que tienen tanto para decirnos.
1. Presta atención a tus creencias
Tus creencias crean el escenario para la curación. Las actitudes positivas estimulan el crecimiento y las actitudes negativas lo impiden. Es importante deshacerse de las actitudes contraproducentes que quizás ni te des cuenta que tienes.
Las creencias, nuestros preconceptos y prejuicios determinan en gran manera cómo será nuestra interpretación de lo que nos sucede; la carga negativa de la realidad que nos rodea, muchas veces está condicionada por las creencias erróneas que hemos desarrollado a lo largo de nuestro crecimiento.
Para poder hacer frente a una situación determinada, es muy importante aprender a cuestionar nuestras creencias y preconceptos, con el fin de llegar a comprender la realidad con ojos más ligeros y con menos cargas emocionales.
Esta práctica de cuestionarnos a nosotros mismos sobre las creencias, prejuicios y conceptos que tenemos, nos da la oportunidad de que nuestra voz interior comience a oírse también, esa parte más intima que muchas veces, sabe antes que nosotros, lo que más nos conviene.
2. Escucha a tu cuerpo
Tu cuerpo es un receptor intuitivo complejo y sensible. La mayoría de las personas en la sociedad occidental están condicionadas a vivir desde el cuello hacia arriba, ignorando el resto de su cuerpo. Esta postura es contraintuitiva. Ser consciente de la sensualidad de tu cuerpo abre la intuición. Entonces estarás más en sintonía con las primeras señales de advertencia que envía tu cuerpo y serás capaz de oír lo que la intuición tiene para decirte.
3. Escucha tu voz interior
Cada uno de nosotros posee una voz intuitiva que contiene respuestas sobre nuestra curación interior. Debido a que nuestro intelecto a menudo es tan fuerte, esta voz a menudo se ahoga. Es esencial que aprendamos a acceder a la quietud interna (existen muchas técnicas para conseguirlo, desde la práctica cotidiana de la meditación, relajación, la lectura, yoga, Tai Chi, etc) para obtener respuestas sobre nuestra salud.
Dedica unos minutos cada día a escuchar esta voz. Puede aparecer como una sensación visceral, un presentimiento, una imagen, un sonido, una memoria, un conocimiento instantáneo, como si una bombilla se encendiera de repente. Aprende a confiar en las señales que envía tu sabiduría interior.
4. Escucha tus sueños
La intuición es el lenguaje de los sueños. Cada noventa minutos cada noche durante la etapa de sueño REM, soñamos. Los sueños proporcionan respuestas sobre nuestra salud, relaciones, opciones de carrera, cualquier nueva dirección que necesitemos tomar.
El secreto es recordarlos, para ello puedes mantener un diario de sueños junto a tu cama. Antes de irte a dormir, haz una pregunta a un sueño. Por ejemplo, ¿Es esta relación sana para mí o debo seguir adelante solo a sola? A la mañana siguiente, escribe cualquier sueño inmediatamente antes de levantarte de la cama.
Intenta repetir la pregunta, todas las noches durante la próxima semana hasta que llegue tu respuesta. A medida que desarrolles el hábito de recordar los sueños, podrás beneficiarte de esta forma de intuición. "Como médico, tengo un sentido continuo de admiración por la relación entre el cuerpo y espíritu", dice la psiquiatra Judith Orloff, cuando tu corazón se abre, también lo hace tu intuición. Tu intuición te enseñará cómo ver y cómo amar.
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