El Gobierno de Donald Trump no cesa en su línea de culpar a China de haber extendido la pandemia del coronavirus, para debilitar el statu quo internacional y aprovecharse de la situación de crisis en todo el mundo.
El último ataque la ha proferido Peter Navarro, uno de los asesores de Trump, que ha sugerido que China, de manera intencionada, subió en 'strong>aviones' a personas contagiadas para propagar la infección por todo el mundo. "El virus se generó en la provincia de Wuhan, el paciente cero fue en noviembre", sostiene el asesor comercial en el programa 'This Week' de la cadena ABC, y recoge Bloomberg.
"Los chinos, con el escudo de la Organización Mundial de la Salud, escondieron del mundo durante dos meses el virus y luego enviaron a cientos de miles de chinos en aviones a Milán, Nueva York y en todo el mundo para sembrarlo", continúa, señalando dos centros financieros del mundo en los que el virus ha atacado con especial virulencia.
Estos comentarios se suman al goteo constante de ataques estadounidenses contra China, incluidas las sugerencias de que el virus escapó de un laboratorio de la ciudad de Wuhan. "Pregúntele a China", respondió a la pregunta incómoda de una periodista en una reciente rueda de prensa, que dio por concluida después con malos modos.
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